Ozzy Osbourne
Ozzy Osbourne, líder de Black Sabbath e icono del heavy metal muere a los 76 años
Aunque las causas de su muerte no han sido oficialmente detalladas, Osbourne enfrentaba desde hace años la enfermedad de Parkinson, además de complicaciones derivadas de múltiples cirugías y lesiones, lo que lo llevó a retirarse de las giras en 2023.CIUDAD DE MÉXICO (apro).-El mundo del rock y el heavy metal está de luto tras la confirmación del fallecimiento de John Michael "Ozzy" Osbourne a los 76 años, una leyenda cuya voz y carisma definieron un género y marcaron generaciones. Aunque las causas de su muerte no han sido oficialmente detalladas, Osbourne enfrentaba desde hace años la enfermedad de Parkinson, además de complicaciones derivadas de múltiples cirugías y lesiones, lo que lo llevó a retirarse de las giras en 2023. Su legado, sin embargo, permanece imborrable como pionero del heavy metal y una figura cultural de impacto global.

Crédito: Ozzyosbourne / Instagram
Una trayectoria que forjó el heavy metal
Nacido el 3 de diciembre de 1948 en Birmingham, Inglaterra, en el seno de una familia trabajadora, Osbourne mostró desde joven una pasión por la música, inspirado profundamente por The Beatles, particularmente por John Lennon, a quien consideraba su mayor ídolo. A los 14 años, tras escuchar "She Loves You", decidió que su destino era convertirse en una estrella de rock.
En 1967, formó su primera banda, Rare Breed, junto al bajista Geezer Butler, y poco después se unió a Tony Iommi y Bill Ward en Polka Tulk Blues, que evolucionaría a Earth y, finalmente, en 1969, a Black Sabbath, nombre inspirado en una película de terror de Boris Karloff.
Black Sabbath, con su sonido denso, letras oscuras y el uso del tritono —la "nota del diablo"—, revolucionó la música al crear el heavy metal. Álbumes como Paranoid (1970), Master of Reality (1971) y Sabbath Bloody Sabbath (1973) no solo lograron ventas millonarias, sino que se convirtieron en referentes del género, influyendo a bandas como Metallica, Slipknot y Judas Priest. La voz única de Osbourne, combinada con los riffs de Iommi, las letras de Butler y el ritmo de Ward, dio vida a himnos como "War Pigs", "Iron Man" y "Paranoid", que capturaron la rebeldía y el desencanto de una generación post-hippie.
Tras ser despedido de Black Sabbath en 1979 debido a sus problemas con el alcohol y las drogas, Osbourne lanzó una exitosa carrera solista, apoyado por su esposa y mánager, Sharon Osbourne. Su debut, Blizzard of Ozz (1980), con el prodigioso guitarrista Randy Rhoads, incluyó clásicos como "Crazy Train" y "Mr. Crowley", consolidándolo como una fuerza imparable en el rock.
Le siguieron álbumes aclamados como Diary of a Madman (1981), No More Tears (1991) y Patient Number 9 (2022), este último con colaboraciones de Eric Clapton, Tony Iommi y Jeff Beck. Osbourne también impulsó las carreras de guitarristas como Rhoads, Jake E. Lee y Zakk Wylde, dejando una huella imborrable en la música.
Su vida personal, marcada por excesos y controversias —como el infame incidente de 1982 en el que mordió la cabeza de un murciélago vivo en un concierto, creyendo que era de utilería—, lo convirtió en un ícono de la rebeldía. A pesar de sus adicciones, Osbourne resurgió en los 2000 con el reality show The Osbournes (2002-2005), que lo conectó con nuevas audiencias y mostró su lado humano junto a su familia. También creó el Ozzfest, un festival que dio espacio a bandas emergentes y consagradas del metal.
Influencias que moldearon un género
Las influencias de Osbourne y Black Sabbath fueron clave para definir el heavy metal. Inspirados por el cine de terror y la música de bandas como Led Zeppelin, Deep Purple y The Beatles, crearon un sonido crudo y oscuro que reflejaba los tiempos turbulentos de finales de los 60. La innovación de Iommi, quien tras perder las puntas de dos dedos adaptó su técnica con cuerdas más graves, dio al género su característica densidad. Las letras de Butler, cargadas de temas como el ocultismo, la guerra y la alienación, resonaron con una juventud desencantada.
Bandas como Slipknot, Metallica y Pantera han reconocido a Black Sabbath como una "receta" para el metal, con Corey Taylor de Slipknot afirmando que "nos dieron el libro de recetas". La vocalista de Halestorm, Lzzy Hale, también destacó la influencia de Osbourne en su carrera, describiendo cómo su música la atrapó desde joven.
El último rugido: "Back to the Beginning
"El 5 de julio de 2025, Osbourne ofreció su concierto final, Back to the Beginning, en el estadio Villa Park de Birmingham, reuniendo a la formación original de Black Sabbath —Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward— por primera vez en 20 años. A pesar de su deteriorada salud, que lo obligó a cantar sentado en un trono adornado con murciélagos y calaveras, Osbourne dio un espectáculo emotivo, acompañado por bandas como Metallica, Guns N’ Roses, Slayer, Pantera y Anthrax, además de figuras como Steven Tyler y Tom Morello.
El concierto, que atrajo a más de 40 mil fanáticos de todo el mundo, incluyó un set en solitario con canciones como "I Don’t Know", "Mr. Crowley", "Mama, I’m Coming Home" y "Crazy Train", seguido de un cierre con Black Sabbath interpretando "War Pigs", "N.I.B.", "Iron Man" y "Paranoid". La audiencia, emocionada, coreó su nombre mientras fuegos artificiales iluminaban el cielo. Osbourne, visiblemente conmovido, expresó: “No tienen ni idea de cómo me siento. Gracias de todo corazón”.
Las ganancias del evento, que recaudó 190 millones de dólares, fueron donadas a organizaciones benéficas como Cure Parkinson’s y el Hospital Infantil de Birmingham.
Un legado inmortal
Ozzy Osbourne deja un legado que trasciende la música. Con más de 75 millones de discos vendidos con Black Sabbath y una carrera solista igualmente exitosa, su influencia en el heavy metal es indiscutible. A pesar de sus batallas personales, su carisma, humor y determinación lo convirtieron en un ícono cultural. Como dijo en una entrevista en 2023: “No sé por qué sigo aquí y a veces pienso que estoy en tiempo prestado”. Su esposa Sharon, su pilar durante décadas, lo describió como una “figura de porcelana” que, aun frágil, mantuvo una vitalidad admirable.
Hoy, el "Príncipe de las Tinieblas" descansa, pero su rugido resonará eternamente en los corazones de los fanáticos y en la historia del rock.