Jimmy Kimmel
La libertad de expresión bajo la lupa en EU tras la cancelación del show de Jimmy Kimmel
Figuras de la política y el cine han condenado la decisión como un ataque a la libertad de prensa. “No tenía talento”, afirmó Trump en su defensa.El show de Jimmy Kimmel fue cancelado después de que el presentador estadounidense sugiriera que los seguidores del presidente Donald Trump querían “sacar partido” de la detención del sospechoso del asesinato del activista conservador Charlie Kirk. Figuras de la política y el cine han condenado la decisión como un ataque a la libertad de prensa. “No tenía talento”, afirmó Trump en su defensa.
El show de Jimmy Kimmel salió del aire “indefinidamente”, anunció en la noche del 17 de septiembre la cadena 'ABC' —propiedad de Walt Disney Pictures—. La salida precipitada del comediante se informó horas después de que el presidente de la Comisión federal de Comunicaciones (FCC), Brendan Carr, lo acusara de realizar un “esfuerzo concertado para mentirle al pueblo estadounidense” sobre las creencias del asesino de Charlie Kirk, activista conservador cercano a Trump.
Carr ha criticado abiertamente lo que llama “sesgos liberales” de la prensa estadounidense, por lo que su postura concuerda con la del presidente Trump, quien se refiere frecuentemente a la prensa como difusora de “fake news” y “enemigos del pueblo”.
Carr fue designado por Trump en enero de 2025 para presidir la FCC, entidad responsable de emitir las licencias de transmisión de las cadenas locales.
Anna Gómez, la única comisionada demócrata de la FCC, dijo a 'CNN' que “la primera enmienda no puede permitir a la FCC decirle a los radiodifusores qué pueden transmitir”.
Lo que sí puede es retener la licencia a una cadena de radio o televisión que no favorezca el interés público, un argumento con el que Carr podría impulsar en el futuro vetos como el impuesto a Kimmel.
“En la FCC vamos a imponer la obligación del interés público. Si hay difusoras a las que no les gusta, pueden entregar su licencia”, dijo Carr al ser entrevistado en un podcast.
En esa misma participación, emitida horas antes de la suspensión de 'Jimmy Kimmel Live', Carr instó a ABC y sus afiliadas a “encontrar formas de cambiar su conducta y tomar medidas contra Kimmel”. Y agregó: “Podemos hacer esto por las buenas o por las malas”.
Después de que Carr atizará el fuego contra Kimmel, el operador de televisión Nexstar Media Group, que trabaja con más de 20 cadenas afiliadas de ABC, calificó los comentarios del comediante como “ofensivos e insensibles” en un momento “crítico” del “discurso político nacional”. Minutos después, ABC comunicó la suspensión de 'Jimmy Kimmel Live'.
Nextar se encuentra en medio de una adquisición de otro grupo de estaciones televisivas en EE. UU., para la que necesita el respaldo de Trump en la flexibilización de los límites gubernamentales sobre la propiedad de radiodifusoras.
Las palabras que disgustaron al círculo cercano de Trump fueron pronunciadas por Kimmel durante su monólogo de apertura del 15 de septiembre:
“La pandilla Maga [Make America Great Again] está intentando desesperadamente caracterizar a este chico que asesinó a Charlie Kirk como alguien distinto a uno de ellos, y está haciendo todo lo posible para sacar partido político con ello”, afirmó el comediante.
Avanzado el monólogo, Kimmel cuestionó la respuesta Trump a una pregunta sobre cómo se sentía tras la muerte de Kirk, quien era cercano al mandatario. “Muy bien”, expresó el republicano antes de comentar sobre una reforma del salón de baile de la Casa Blanca. A juicio del presentador estadounidense, “así no es como un adulto llora la muerte de alguien a quien considera amigo. Así es como un niño de cuatro años llora la muerte de un pez dorado”.
Kirk fue asesinado de un disparo el 10 de septiembre por un joven blanco de 22 años, mientras ofrecía un discurso en la ciudad de Utah.
Presión a la prensa e informadores
Los señalamientos contra Trump por presiones a la prensa y la comunicación acumulan varios casos desde que el republicano regresó al poder en enero de este año.
El presidente ha interpuesto algunas demandas contra medios de comunicación, a los que acusa de difamarle. Hace solo semanas, abrió un litigio por 15.000 millones de dólares contra 'The New York Times', cuatro de sus reporteros y Penguin Random House por el libro 'Lucky Loser', que cuestiona la historia de Trump en el mundo de las finanzas.
El mandatario también ha demandado a 'CBS', 'The Des Moines Register', 'Gannett' y el Centro Pulitzer.
En marzo de 2025, la Casa Blanca prohibió por 74 días el acceso a periodistas de la agencia informativa Associated Press (AP) a espacios como la Oficina Oval, el avión presidencial y eventos de la Administración.
Este veto fue una consecuencia de la negativa de AP a referirse al Golfo de México como el Golfo de Estados Unidos, tal como había decretado Trump. Un juez federal ordenó la reacreditación de los periodistas, citando la Primera Enmienda, que garantiza el derecho a la libertad de expresión.
Desde que Carr está a la cabeza de la FCC, la entidad ha iniciado investigaciones contra 'CBS', 'NPR', 'PBS' y 'ABC' por “distorsión de noticias” y por emitir contenido “no acorde con los valores de la comunidad”.
Paralelamente, Estados Unidos ha recortado los presupuestos destinados a las fuentes de información.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) apunta a que la eliminación de ayudas de la Administración Trump a medios financiados por la Agencia de Estados Unidos para los Medios de Comunicación Globales (USAGM) se ha traducido en que “millones de personas en todo el mundo se han quedado sin fuentes de información fiables”.
RSF rechaza además la eliminación de “más de 8.000 páginas web gubernamentales” sobre temas “de interés público”, ordenada por Trump "a los pocos días de asumir el cargo”. Esta medida, a juicio de la entidad, "impide el acceso de periodistas y ciudadanos a datos esenciales de interés público".
Cuestionamientos a la libertad de expresión
La suspensión indefinida de 'Jimmy Kimmel Live' ha despertado el rechazo de notables figuras de la política, la cultura y el cine.
Un grupo de senadores demócratas emitió un comunicado en el que definen la medida como "un ataque contra el derecho a la libertad de expresión", garantizado por la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense.
Sobre Carr, han escrito que “ha deshonrado el cargo que ocupa al intimidar a 'ABC' y obligar a la compañía a doblegarse ante la Administración Trump”. Acto seguido, dijeron que el jefe de la FCC debería "renunciar de inmediato".
Donald Trump negó cualquier censura a la libertad de expresión al afirmar que Kimmel “no tenía talento”.
En una rueda de prensa en Reino Unido —donde realizó una visita oficial—, aseguró que “despidieron a Jimmy Kimmel principalmente por sus malos índices de audiencia, más que por cualquier otra cosa”, aunque agregó: “Dijo algo horrible sobre un gran caballero conocido como Charlie Kirk”.
Hollywood también ha expresado su repulsa ante la suspensión. El sindicato de actores y artistas SAG-AFTRA definió la decisión como “un tipo de represión y represalia que pone en peligro las libertades de todos”.
La actriz Jean Smart se describió “horrorizada” con la cancelación del show. “Lo que dijo Jimmy era libertad de expresión, no discurso de odio. Parece que la gente quiere proteger la libertad de expresión solo cuando cumple sus propósitos”, escribió en su cuenta de Instagram.