MADRID (EUROPA PRESS).- El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro fue ingresado este viernes nuevamente tras sufrir unos ya recurrentes dolores abdominales, como consecuencia de la puñalada que sufrió en 2018, confirmó su hijo Flávio.

"No estoy con él, pero lo pasó mal, sí, está con dolores estomacales. Está siendo medicado y va a ser trasladado a un hospital en Natal", contó Flávio, después de que en primer momento fuera atendido en un centro médico en Santa Cruz.

Bolsonaro se encuentra estos días en Río Grande del Norte, como parte de una gira de su partido que le llevará por otras localidades del estado. En el momento en el que se ha encontrado con dolores se encontraba en el municipio de Bom Jesus.

Según el balance médico del Hospital Río Grande, en Natal, Bolsonaro se encuentra estable tras haber sido atendido por una "distensión abdominal", si bien está programado un examen de imagen con contraste para "una mejor valoración".

Esas pruebas servirán para decidir los siguientes pasos. El centro ha reservado una planta entera para el expresidente alegando motivos de seguridad.

Las visitas al hospital de Bolsonaro por las secuelas generadas por aquel atentado han sido recurrentes en los últimos años. Además de pruebas rutinarias y ha llegado incluso a pasar varios días ingresado, como el año pasado cuando llegó a permanecer casi dos semanas en un centro médico de Sao Paulo.