Daniel Noboa
Noboa reitera tras ataque a su convoy que "unos pocos vándalos" no le impedirán trabajar por Ecuador
La mayor organización indígena del país califica de "provocación" el paso de la caravana presidencial por una "zona de resistencia"MADRID, (EUROPA PRESS) - El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, reiteró tras el ataque a su convoy que "unos pocos vándalos" no impedirán que siga trabajando por Ecuador y advirtió de que este tipo de hechos ya no se permiten y serán castigados.
"Esas agresiones no se aceptan en el nuevo Ecuador, la ley se aplica para todos", expresó el mandatario durante una acto celebrado en la ciudad de Cuenca junto a un grupo de escolares, a quienes les ha pedido que "no sigan el mal ejemplo" de aquellos que le han apedreado horas antes.
Nos querían parar para que no esté yo presente en este evento con ustedes, trataron de agredirnos", dijo Noboa, quien ha subrayado que "unos pocos vándalos" no impedirán que siga trabajando por el país, según recoge Ecuavisa.
Las autoridades ecuatorianas han detenido a cinco personas sospechosas de participar este martes en el ataque al convoy del presidente Noboa, recibido con piedras a su paso por la provincia de Cañar, si bien la ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, aseguró también la presencia de "signos de balas".
Los cinco sospechosos han sido trasladados a la ciudad de Cuenca, según ha confirmado la Federación de Organizaciones Indígenas y Campesinas del Azuay (FOA). Su coordinador, Yaku Pérez, en calidad de abogado, ha sostenido que no formaron parte de "las agresiones a la caravana presidencial".
"Ellos manifiestan que no estuvieron, en ningún momento, ejerciendo actos de violencia. Ninguno de ellos estuvo en la protesta, solamente se les confundió", ha alegado Pérez, quien ha denunciado el uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes de seguridad durante la detención de estos, informa 'El Universo'.
Está previsto que este miércoles se les informe formalmente de lo que se les acusa. Las autoridades colombianas ya han adelantado que serán procesados por delitos de intento de asesinato contra el presidente, lo que supone penas de entre diez y trece años de cárcel.
El ministro del Interior, John Reimberg, ha advertido de que aquellos que pretenden "desestabilizar" el país, sea cual sea su papel, "se enfrentarán sin excepción a todo el peso de la ley" y "serán procesados por terrorismo".
LA CONAIE CALIFICA LOS HECHOS DE "PROVOCACIÓN" DEL GOBIERNO
La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE) ha acusado al Gobierno de provocar estos hechos al haber cruzado por una "zona de resistencia" con el objetivo de conseguir una justificación para la "represión" contra estos colectivos, en un momento además de protestas por eliminar el subsidio al diésel.
En ese sentido, no descartan que lo ocurrido en Cañar se trate de "un acto de falsa bandera" para "criminalizar el movimiento indígena y popular" y desviar la atención de la "grave crisis" social, política y económica por la que pasa Ecuador.
Asimismo, se ha preguntado cómo es posible que los servicios de seguridad del presidente Noboa no fueron capaces de valorar que una situación de estas características podría producirse al cruzar por una "zona de movilización".
"El Estado debe garantizar la seguridad del presidente sin exponer a la población civil ni usar los recorridos oficiales como provocación política", ha señalado este miércoles la mayor organización indígena de Ecuador en un comunicado.
La CONAIE ha rechazado las acusaciones de que estas organizaciones indígenas estén detrás de este supuesto intento de magnicidio y ha denunciado los abusos a los que habrían sido sometidos los detenidos, para quienes piden su liberación.
Nuestras movilizaciones son legítimas, nacen del abandono estatal y de la exclusión estructural. El movimiento indígena no es terrorista, es un movimiento histórico por la vida, la dignidad y los derechos de los pueblos", reivindicó.