Irlanda
La abanderada de la izquierda, Catherine Connolly, será la nueva presidenta de Irlanda
Tras el escrutinio de cuatro las 43 circunscripciones irlandesas Connolly obtiene un 60.7 por ciento de votos, frente al 30.9 por ciento de Heather Humphreys, quien ya reconoció la derrota.MADRID (EUROPA PRESS) - Catherine Connolly será la nueva presidenta de Irlanda de acuerdo con el recuento oficial, aún parcial, que se está dando a conocer tras las elecciones del viernes, que confirman un batacazo de la coalición de centroderecha del Fianna Fáil y el Fine Gael, representados por la exministra de Protección Social Heather Humphreys, quien ha reconocido ya su derrota.
Humphreys ha felicitado a su rival, quien "será la siguiente presidenta de Irlanda". "Catherine será presidenta para todos nosotros. Será mi presidenta y me gustaría desearle lo mejor de lo mejor", declaró, según recoge la televisión pública irlandesa, RTE.
"No tengo absolutamente nada que lamentar", añadió Humphreys. "La democracia es esto. La gente pone, elige un nombre en una papeleta y sigue adelante. Estoy satisfecha", resaltó.
Humphreys ha criticado también "los ataques sectarios" en referencia a su familia, de religión y tradiciones protestantes presbiterianeas. "Mi familia y yo, pero especialmente mi familia, han sufrido ataques sectarios y me ha decepcionado porque creía que habíamos superado eso como país", declaró.
"Creo que es necesario comprender mejor otras traiciones de este país y quizás es algo en lo que puedo aportar porque hay muchos malos entendidos y si vamos a tener una Irlanda unida tendremos que respetar todas las tradiciones", añadió en referencia al conflicto de Irlanda del Norte.
Tras el escrutinio de cuatro las 43 circunscripciones irlandesas Connolly obtiene un 60.7 por ciento de votos, frente al 30.9 por ciento de Humphreys y el 8.4 por ciento del candidato conservador Jim Gavin, del Fianna Fáil, a pesar de que Gavin retiró su candidatura el pasado 5 de octubre para apoyar a Humphreys.
Encuestas previas ya daban a Connolly, de 68 años, representante de la izquierda irlandesa (si bien se ha presentado como independiente), la victoria en unos comicios que, de ratificarse en los resultados oficiales de las próximas horas, la convertirán en la décima presidenta de Irlanda; un cargo en apariencia protocolario pero con amplias oportunidades para expresar el sentir popular.
Connolly ha acusado a la OTAN ejercer prácticas belicistas, ha comparado el gasto armamentístico de Alemania con el de la década de 1930, ha votado en contra de los tratados de la UE y ha afirmado que Hamás es "parte del tejido social del pueblo palestino". En este sentido, Connolly ha denunciado sin paliativos el genocidio en Gaza por los ataques de Israel, y ha prometido viajar a Palestina como presidenta irlandesa para declarar en persona su apoyo a la población.
Sucederá, si se cumplen los pronósticos, al poeta y exministro Michael D. Higgins, que ha llegado al límite de dos mandatos.
Muchos votos nulos con quejas y amenazas
La líder del partido Laborista de Irlanda, Ivana Bacik, celebró la posible victoria de Connolly –quien precisamente empezó su carrera política en esta formación–, pero llamó la atención sobre la gran cantidad de votos nulos depositados al escribir los votantes en la papeleta sus quejas sobre la situación del país, e incluso amenazas contra los representantes públicos.
"Primero, hay que tomárselo en serio. Debemos analizar las preocupaciones de la gente y por qué se sintieron no representados por los candidatos en estas elecciones", explicó a RTE antes de condenar algunos de los mensajes, de marcada tendencia "antidemocrática".
"El nivel de virulencia dirigido a personas de todas las tendencias políticas en algunas de esas papeletas nulas es realmente alarmante, y creo que significa que debemos tomarnos muy en serio esa amenaza", advirtió.
La campaña Arruinemos la Votación reivindica "una respuesta argumentada a la creciente preocupación de la población por la falta de opciones reales en las elecciones presidenciales", según la web del grupo.
Los partidos del gobierno tienen a una candidata, destacan, mientras que "solo se ha permitido a una única candidata independiente, de izquierda, Catherine Connolly, sin ningún candidato centrista ni de centro-derecha que represente a esta significativa parte del electorado".