Corea del Norte

Corea del Sur dice que Corea del Norte disparó un misil balístico al mar

El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur denunció el lanzamiento como una provocación que representa una seria amenaza para la paz y la estabilidad en la península de Corea.
lunes, 6 de enero de 2025 · 08:06

SEÚL, Corea del Sur (AP) — Corea del Norte disparó el lunes un presunto misil balístico que voló 1.100 kilómetros (685 millas) antes de caer en aguas entre la península de Corea y Japón, informó el ejército de Corea del Sur, extendiendo sus intensificadas actividades de pruebas de armas semanas antes de que Donald Trump regrese como presidente de Estados Unidos.

El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijo que el misil de alcance medio fue disparado desde un área cercana a la capital norcoreana de Pyongyang y que las preparaciones para el lanzamiento fueron detectadas con anticipación por los militares de Estados Unidos y Corea del Sur. Denunció el lanzamiento como una provocación que representa una seria amenaza para la paz y la estabilidad en la península de Corea.

El Estado Mayor Conjunto agregó que las fuerzas militares estaban reforzando su postura de vigilancia y defensa en preparación para posibles lanzamientos adicionales.

El Ministerio de Defensa de Japón indicó que el misil cayó fuera de su zona económica exclusiva y que no hubo informes de daños a embarcaciones o aeronaves.

El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, expresó su preocupación por el ritmo acelerado de las pruebas de misiles del Norte, que está avanzando en sus capacidades. El año pasado, el Norte probó varios sistemas capaces de portar armas nucleares que amenazan a sus vecinos y a Estados Unidos, incluyendo un nuevo misil balístico intercontinental de combustible sólido que alcanzó la mayor altitud y el tiempo de vuelo más largo de cualquier misil lanzado por el país.

El lanzamiento ocurrió mientras el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, visitaba Seúl para conversaciones con los aliados surcoreanos sobre la amenaza nuclear norcoreana y otros temas.

La visita de Blinken se produce en medio de la agitación política en Corea del Sur tras el breve decreto de ley marcial del presidente Yoon Suk Yeol y su posterior destitución por el Parlamento el mes pasado, lo que, según los expertos, sitúa al país en una posición de desventaja a la hora de establecer una relación estable con Trump antes de su regreso a la Casa Blanca.

En una conferencia de prensa con el ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Cho Tae-yul, Blinken condenó el último lanzamiento de Corea del Norte, que viola las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU contra el Norte. También reiteró preocupaciones sobre la creciente alineación entre Corea del Norte y Rusia en la guerra de Moscú en Ucrania.

Según evaluaciones de Estados Unidos, Ucrania y Corea del Sur, Corea del Norte ha enviado más de 10,000 tropas y sistemas de armas convencionales para apoyar la campaña bélica de Moscú. Hay preocupaciones de que Rusia podría transferir a Corea del Norte tecnología avanzada de armas a cambio, lo que podría potencialmente aumentar la amenaza que representa el ejército nuclear de Kim Jong Un.

Blinken describió la cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte como una “calle de doble sentido”, diciendo que Rusia ha estado proporcionando equipo militar y entrenamiento al Norte y “tiene la intención de compartir tecnología espacial y satelital”.

Blinken y Cho descartaron preocupaciones sobre daños a la alianza entre Estados Unidos y Corea del Sur tras la agitación política en Seúl. Expertos habían advertido que el decreto de ley marcial de Yoon —que duró solo horas pero ha sacudido la política, la diplomacia de alto nivel y los mercados financieros durante semanas— expuso la fragilidad del sistema democrático de Corea del Sur en una sociedad dividida.

“Teníamos serias preocupaciones sobre algunas de las acciones que tomó el presidente Yoon y las comunicamos directamente al gobierno”, dijo Blinken. “Al mismo tiempo, tenemos una tremenda confianza en la resiliencia de la democracia de Corea del Sur, en la fortaleza de sus instituciones y en los esfuerzos que está haciendo para trabajar a través de esas instituciones, de acuerdo con la constitución y el estado de derecho para resolver diferencias y hacerlo de manera pacífica”.

En una conferencia política de fin de año, el gobernante norcoreano Kim Jong Un prometió implementar la política antiestadounidense “más dura” y criticó los esfuerzos del gobierno del presidente estadounidense Joe Biden para fortalecer la cooperación en seguridad con Seúl y Tokio, a los que describió como un “bloque militar nuclear para la agresión”.

Los medios de comunicación estatales norcoreanos no especificaron los planes de política de Kim ni mencionaron comentarios específicos sobre Trump. Durante su primer mandato, Trump se reunió tres veces con Kim para conversar sobre el programa nuclear del Norte.

Aunque Trump regrese a la Casa Blanca, es poco probable una rápida reanudación de la diplomacia con Corea del Norte. La posición fortalecida de Kim —basada en su arsenal nuclear expandido, la alianza profunda con Rusia y la debilitada aplicación de las sanciones internacionales de Estados Unidos— presenta nuevos desafíos para resolver el enfrentamiento nuclear, según los expertos.

No está claro si Trump se mostrará tan proactivo como Biden a la hora de reforzar las alianzas de Estados Unidos en Asia.

Durante su primer mandato, Trump se quejó del coste de mantener 28.000 soldados estadounidenses en Corea del Sur para disuadir las amenazas norcoreanas y presionó constantemente para que se aumentaran de manera significativa las aportaciones de Seúl en materia de defensa. También preocupa en Seúl que el enfoque “Estados Unidos primero” de Trump perjudique los intereses surcoreanos en el comercio a través del aumento de los aranceles y otras medidas.

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