Museo Dolores Olmedo
Analizan el fideicomiso del Museo Dolores Olmedo; “cambiar de fiduciaria fue irregularidad”
En una mesa de análisis, especialistas criticaron que se revocara el fideicomiso de Nafin y se otorgara a CI Banco, ahora investigado en Estados Unidos por lavado de dinero.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A decir de especialistas, la revocación de Nacional Financiera (Nafin) como fiduciaria del Fideicomiso del Museo Dolores Olmedo por CI Banco fue una irregularidad más a la voluntad de la mecenas respecto al destino de su amplia colección artística que incluye obras de Diego Rivera, Frida Kahlo, Angelina Beloff, Pablo O’Higgins, cerca de tres mil de arte popular, y 800 de arte prehispánico.
Lo anterior como parte de la mesa de análisis “Revocar lo irrevocable. Fideicomiso Dolores Olmedo” que se efectuó en Casa Lamm (en presencial y video-conferencia) con la participación de Luis Cacho, experto en derecho cultural; Bolfy Cottom, experto en legislación cultural; Adriana Malvido, periodista cultural; el notario Miguel Ángel Beltrán Lara; y Edgardo Bermejo Mora, escritor y diplomático cultural que a su vez fue moderador.
De cara a la posibilidad de que la colección artística se traslade del Museo Dolores Olmedo al Parque Aztlán, en la Segunda Sección de Chapultepec, Luis Cacho abordó que la mecenas dejó estipulado que en caso de que Nafin ya no pudiera o quisiera continuar con su labor como fiduciaria, el Comité Técnico del fideicomiso (conformado en 1993) decidiría una nueva institución.
Sin embargo, lo anterior no ocurrió, pues Nafin dejó de ser fiduciaria por decisión del Comité Técnico en 2020, señalando que ese manejo fue “irregular”:
“El comité revocó a Nacional Financiera y se hizo una sustitución fiduciaria por CI Banco, lo que yo considero va en contra de lo que se estableció en el 2002”.
A lo anterior se suma que CI Banco fue señalado por Estados Unidos como entidad financiera “sospechosa de lavado de dinero”, y temporalmente intervenida por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
Ahí mismo se recordó también lo estipulado en el fideicomiso original (tal y como lo estipuló la mecenas hasta su muerte en 2002) respecto a mantener la colección en el museo de Xochimilco (cerrado desde 2020 tras la pandemia), sin poder cambiar de sede, y con la colección siempre unida –con excepciones de préstamos temporales–, de ahí que un traslado definitivo a Chapultepec sería una violación a la voluntad de Dolores Olmedo.
Sobre este tema, Beltrán Lara comentó que de hecho se puede acudir a las vías legales y solicitar un amparo aludiendo “incumplimiento de obligaciones en materia de patrimonio cultural”, y que el instrumento base sería el documento del fideicomiso.
Hay que recordar que el Museo Dolores Olmedo abrió sus puertas en 1994, cuando Dolores Olmedo Patiño convirtió su antigua casa en recinto abierto al público; por casi 30 años funcionó como un espacio cultural al sur de la Ciudad de México que se detuvo tras la pandemia –y desde entonces cerrado–. Pero, tras la apertura de las cuatro secciones de Chapultepec (Proyecto Chapultepec: Naturaleza y Cultura) se planteó la posibilidad de mudar la colección, que incluye 148 piezas de Diego Rivera y 26 de Frida Kahlo, afirmándose que la idea está planteada desde 2021.