Hipnosis Festival

Hipnosis Festival 2025: Una inmersión sonora entre el ruido y la sugestión

Dos días, sábado y domingo, en los que convergen la nostalgia, el underground y la celebración hacia lo alternativo, con un cartel que fusiona veteranos de culto, proyectos emergentes y un guiño esencial al talento nacional. 
miércoles, 29 de octubre de 2025 · 18:17

CIUDAD DE MÉXICO (apro).-Este 1 y 2 de noviembre se convierte en una suerte de ritual de psicodelia, ruido y éxtasis sensorial con la llegada de la octava edición del Hipnosis Festival en el Estadio Fray Nano. 

Dos días, sábado y domingo, en los que convergen la nostalgia, el underground y la celebración hacia lo alternativo, con un cartel que fusiona veteranos de culto, proyectos emergentes y un guiño esencial al talento nacional. 

En la primera fecha se perfila como un portal hacia lo melancólico-sintético: ahí estará la banda bielorrusa Molchat Doma, emblema del post-punk y la cold wave, cuyo banco de texturas frías remite a una estética tanto soviética como nocturna. También se planta en este día el retorno —más bien la llegada histórica— de la banda neoyorquina Pavement, quienes pisarán por primera vez suelo mexicano. También subirán al escenario el proyecto de la estadounidense -coreana Japanese Breakfast, la imponente presencia de The Horrors, capaces de combinar shoegaze, psicodelia y un gesto gótico subversivo, además de otras propuestas como Geordie Greep, Dummy, eclécticas como las de Skinshape. 

En segunda fecha se propone un tránsito hacia lo espacial, lo guitarrero y lexpansivo: ahí destacan Dinosaur Jr. —una leyenda del rock alternativo estadounidense— y Spiritualized, maestros de la psicodelia de alto vuelo. En el mismo día, la banda mexicana Austin TV cobra protagonismo con una intervención especial: tocarán Indra, su icónico álbum, por única ocasión. También resuenan en el lineup nombres de peso como Deafheaven —mezclando black-metal y post-rock— y bandas que expanden el espectro sonoro del festival. 

¿Por qué este cartel importa? 

Porque este Hipnosis no juega a lo seguro al mezclar la melancolía de la Europa del Este con el legado de la escena indie de los noventa en Estados Unidos 

Rescata la psicodelia británica y deja espacio para lo local, lo experimental y lo ritual. La llegada de Pavement por primera vez a México habla de un momento de re-lanzamiento de una generación que escuchó su música en cinta o en archivos pirata, ahora convertida en culto formalizado. Molchat Doma aporta una sombra nostálgica que revuelve ambientes y provoca. The Horrors y Japanese Breakfast suman atmósferas que van de la intimidad al estallido. Y en el día dos, con Dinosaur Jr. y Spiritualized, se apunta una lógica de “adulto que nunca dejó de querer saltar” y lo hace con guitarras que resuenan en un viejo estadio transformado en templo de trance rockero. 

Este festival se perfila para quienes perciben que los macro-festivales se han vuelto impersonales y los recintos íntimos resultan insuficientes. A quienes añoran el sonido del vinilo, la fricción con la pista de baile y el filo emocional de una guitarra al límite. 

Se mueve también hacia quienes alguna vez soñaron con ver a Pavement hace dos décadas y no pudieron, o a quienes encontraron a Molchat Doma mientras exploraban territorios sonoros fuera del mapa. A quienes valoran que en México aún existen rituales musicales cuidadosamente curados, libres de concesiones al espectáculo fácil. En suma, a quienes buscan ir más allá del cartel principal y permanecer con la pregunta suspendida: “¿y ahora qué?”, cuando las luces se apagan. El Hipnosis 2025 es un cruce de generaciones, de geografías, de sonidos y experiencias. 

 

Comentarios