Lejos de significar una victoria, la decisión refleja la creciente incertidumbre y podría ser la antesala de una negociación más agresiva del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y hasta el mensaje de la muerte del nearshoring, coinciden diversos especialistas.

El mandatario anunció aranceles del 10% a todas las importaciones e impuestos adicionales para unos 60 países, por el momento México y Canadá no aparecen en la lista; entre los más afectados se encuentran China (34%), la UE (20%) y Vietnam (46%).

El primer ministro Mark Carney recordó que siguen vigentes los aranceles por el "fentanilo", así como las tasas sobre el acero y el aluminio.

Es una prueba significativa para la lealtad republicana a la visión de Trump de rehacer la economía de Estados Unidos al restringir el libre comercio.

Los aranceles recíprocos que el presidente de EU planea anunciar se producen luego de recientes impuestos del 25% sobre las importaciones de automóviles; gravámenes contra China, Canadá y México, y aranceles ampliados sobre el acero y el aluminio.

Por el momento México y Canadá no aparecen en la lista de aranceles recíprocos que dio a conocer este miércoles el presidente de Estados Unidos.